¿Qué cantidad de medicamentos antirretrovirales necesita un país?

Estimación y programación de medicamentos

Para alcanzar los objetivos de la estrategia 90-90-90, es esencial que un país tenga disponibilidad suficiente de medicamentos antirretrovirales (ARV) y otros productos para el VIH, tales como pruebas diagnósticas y condones. En la República Dominicana, donde el Gobierno se encuentra inmerso en el proceso de descentralización de su red de servicios de salud y la ampliación del acceso al tratamiento, resulta complicado determinar exactamente qué cantidad debería comprar.

El Proyecto Financiamiento y Gobernabilidad en Salud (HFG) de USAID, contribuyó a desarrollar la capacidad de los actores dominicanos para estimar las necesidades de ARV y productos básicos y asegurar que el país cumpla con los objetivos de prevención y tratamiento del VIH.   Previamente, la República Dominicana dependía de los datos de morbilidad para estimar las necesidades de ARV, lo que implica el uso de perfiles epidemiológicos y planes de tratamiento estándar para proyectar la demanda futura. Este enfoque puede pasar por alto las fluctuaciones en el uso real de TARV, produciendo escasez de algunos medicamentos así como exceso o pérdida de existencias de otros.

HFG brindó asistencia al Servicio Nacional de Salud (SNS)/ Sistema Único de Gestión de Medicamentos e Insumos (SUGEMI), para el desarrollo de una nueva herramienta de cuantificación que compara dos métodos:

proyecciones clásicas de morbilidad versus el consumo histórico de ARV del país. Utilizando
registros de consumo de ARV mantenidos en cada servicio de VIH, la matriz construida por HFG permite a los compradores identificar brechas entre la demanda futura esperada de ARV y los patrones reales de uso. Esto permitirá estimaciones más precisas de las necesidades de ARV, lo cual es crucial para que la República Dominicana alcance los objetivos del 90-90-90: la sobreestimación puede conducir a excedentes y expiración de los medicamentos, mientras que la subestimación puede causar faltas peligrosas en el suministro de ARV y subsiguientes brechas en la adherencia a los regímenes de tratamiento. Las estimaciones más precisas aumentarán la eficiencia al garantizar que solo se presupueste la cantidad necesaria, y nada más, para las compras de ARV y productos básicos.

La nueva herramienta de cuantificación basada en el consumo histórico se utilizó para informar el cálculo del financiamiento y montos necesarios para la respuesta nacional al VIH y sida para el 2019.  La Dirección General de Control de Enfermedades de Transmisión Sexual y SIDA (DIGECITSS), el Departamento de Medicamentos e Insumos (DMI) del Servicio Nacional de Salud  y el Consejo Nacional para el VIH y el Sida (CONAVIHSIDA), realizan ejercicios de programación y cuantificación todos los años.

En este año, para cada medicamento o producto básico, los técnicos calcularon y compararon los métodos de morbilidad y consumo, utilizando proyecciones epidemiológicas, pautas de dosificación y el registro mensual de consumo y existencias del SUGEMI, entre otras fuentes.  En abril de 2018, representantes de HFG y los actores anteriormente mencionados se reunieron en un taller, donde se decidió que el método de consumo histórico se utilizaría para calcular la programación final de las necesidades para el 2019.

La estimación precisa y actual de la demanda es especialmente importante para este próximo año: el Servicio Nacional de Salud está emprendiendo la enorme tarea de descentralizar los servicios de monitoreo inmunológico (tales como la prueba de carga viral) a los Servicios Regionales de Salud, al igual que se prepara para implementar la estrategia “Tratamiento para Todos ” con la que se proyecta expandir el tratamiento a 7.000 personas que viven con VIH, en el próximo año. Debido a estos cambios y a la matriz de cuantificación mejorada, el requerimiento financiero para el 2019 asciende a USD$ 13,6 millones, un aumento del 7% (USD$ 1,2 millones) con relación al 2018.

El apoyo de HFG para el diseño de la nueva matriz de estimación ya está contribuyendo a fortalecer la cadena de suministro del VIH a partir del año fiscal del 2019.  Esta herramienta continuará apoyando a la República Dominicana en la toma de decisiones de compra informadas y eficientes en los próximos años.

Tags: , ,

Back to Top